
¡Muy buenas amigos! Me llamo SSC y me incorporo al equipo de The Walking Dead Spain con la mayor de las ilusiones.
En principio me encargaré de las reviews de los tebeos de Robert Kirkman, así que todos aquellos que sigáis la historia en su versión comiquera tenéis una cita conmigo todos los meses para comentar y debatir sobre la magnífica obra de Kirkman y Adlar.
Sin más preámbulos, pasamos directamente a lo que nos ocupa, y no es otra cosa que el número 131 de The Walking Dead. ¡Comenzamos!

Para comenzar con el número 131, lo mejor es repasar dónde nos dejó el 130. Lo hacemos brevemente. Lo más llamativo del anterior capítulo es sin duda el mal rato que pasan Marco y Ken, bajo la lluvia y perseguidos por una buena cantidad de zombis. Cuando deciden esconderse, escuchan aterrados como de la turba de muertos vivientes, surgen voces.
Así llegamos al capítulo 131, Maggie intenta calmar a Marco, que ha llegado sólo a La Colina después de dejar a Ken escondido en un granero. La expresión de pavor de Marco es una genialidad de Adlar. Una más de las muchas que nos ha dedicado.

Kirkman sigue cociendo a fuego lento la trama. Tras la elipsis temporal no deja de mostrarnos la calma después de la tempestad, la paz después de la batalla. Las comunidades trabajan al unísono en pos de un bien común, comercian por el sistema del trueque y conviven en la mejor de las condiciones desde el apocalipsis zombi. El autor tiene mucho interés en que nos demos cuenta de ello. Se prepara una feria, los vecinos almuerzan en comunidad al menos un par de días a la semana, un maduro Carl (genial su argumento para no leer la carta de su amiga) va a mudarse a La Colina para aprender a trabajar el metal, los zombis son un problema con el que han aprendido a lidiar... parece que todo es paz y armonía y sólo el hecho de que sabemos que Negan aún vive nos preocupa un poco.



Dejamos abierta esta cuestión porque Kirkman cambia la localización de la trama y nos lleva a Alejandría. Andrea y Eugene hablan de sus cosas pero, lo que ella no espera, es que los últimos en llegar, Magna y sus amigos, aún no ven las cosas claras y la atacan en su casa para interrogarla más a fondo.
Aunque en un principio tanta descofianza a nosotros nos puede molestar, creo que el autor pretende hacer un paralelismo entre la situación que ahora viven ellos con la que antes vivían Rick y los suyos. Tienen miedo. Han pasado por mucho y sus instintos les dicen que en un mundo nuevo como este no puede crearse algo bueno sin que esté corrupto. Su temor es hacerse a la idea de algo bueno y perderlo. Algo que hemos visto antes en nuestros héroes, pero ahora visto desde la perspectiva opuesta. Un interesante punto de vista que vamos a investigar en breve.
Y así termina este capítulo 131. Resumiendo, Kirkman nos muestra una nueva sociedad mientras va abriendo subtramas que más temprano que tarde saltarán a primer plano. ¿Zombis que hablan? ¿Negan? ¿Magna y los suyos serán un dolor de muelas o se adaptarán? Ella es sin duda un alter ego femenino de Rick, sus personalidades pueden chocar. ¿Qué pasa con Michonne? ¿Carl y Sophia? ¿Se armará la de Dios es Cristo en la feria una vez que haya alcohol para todos? ¿Cuándo veremos El Reino?...
No dejéis de leer los tebeos y recordad que os espero en esta sección poco después de la publicación de cada número. ¡Hablemos sobre el cómic!
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